Relato de insmonio.

(No puedo dormir, voy a escribir un cuento desde blogger, sin corregir, un relato de un solo jalón, de una sola oportunidad... a ver como queda)


Abre los ojos, despierta... despierta

Aimé se incorporó de un tirón y miró a su alrededor... aun era de madrugada.

Sintió el frio del piso en sus pies, la casa estaba casi en silencio, el reloj de pared daba un sonido sordo tic tac tic tac paseó por la casa, sus pisadas eran silenciosas, se sentía como un fantasma hasta que finalmente llegó a la ventana y la abrió.  La noche se veía estrellada, y el aire helado tocó sus mejillas.

Entonces, comenzó a hablar sola. (prefiero decir 'con ella misma')

"El mundo es un lugar muy chiquito... al ver una estrella o una nube instantáneamente pienso en ti... ¿estarás viendo lo mismo que yo? ¡imagina que estando tan lejos hemos pasado sobre la misma  nube! ¡la misma estrella! ... pero no, eres muy distraido...entonces... ¿pensarás en mi? Yo lo hago todos los días y cuando te extraño hasta que duele miro al cielo y venus está allí para consolarme, ese planeta que a nuestros ojos parece una estrellita me inyecta esperanza...


Hagamos algo, cuando me recuerdes y estes triste, mira a venus y sabré que piensas en mi... entonces recuerda lo que ahora digo... todo va a estar bien, no estes triste, no tengas miedo...


También piensa que nunca estaremos lejos, pues estamos en el mismo cielo, aunque yo viviera en China y tú en Alaska, siempre sabremos encontrarnos..."

Una lagrimita le rodó por el rostro, decidió  volver a la cama... estando allí abrazó una almohada, junto a ella había un lugar mullido y vacío...

...esperando