lunes, septiembre 26, 2011

Caminos separados, pero no para siempre.

Arthur corrió a su habitación, desde allí pudo ver a Simone alejarse rápidamente ¿qué había pasado hace unos momentos? ¿era posible que pese a todo ese tiempo juntos ella aun no se había dado cuenta de algo tan obvio?


De nada servía resolver las interrogantes, no regresaría… no mientras la biblioteca siguiera en movimiento.

-“Entonces…entonces…”

Bajó las escaleras con paso apresurado hasta llegar al cuarto de máquinas y jalando una veintena de palancas la biblioteca se detuvo, él la esperaría.

No tuvo certeza de cuanto tiempo pasó, pero no se movió en un buen rato hasta que escuchó las pisadas de Hans.

-“Pero Arthur ¿qué haces allí? Ponte de pie y pon a funcionar este cacharro”

-“Simone se fue… no pienso moverme de aquí, por si decide volver”

-“No lo entiendo, si ella no está aquí es por que así lo quiso ¿que razón tendría para  querer regresar donde huyó deliberadamente?”

Silencio largo, el filósofo no respondió.

-“¿Sabes que significa el nombre de la princesa?” –Preguntó Hans mientras metía su cabeza por debajo del brazo izquierdo de Arthur.

-“No” dijo secamente.

-“La que me ha escuchado”

El corazón del filósofo se aceleró, si pudiera describir lo que Simone era para él, esas serían las palabras que hubiera escogido, sintió una lágrima brotar, una sola en el ojo derecho… no recordaba la última vez que eso había sucedido.

-“Deberías sentirte agradecido, encontraste lo que llevabas tantos años buscando,  ahora es momento de dejarla libre, para que ella encuentre esa cosa tan simple que la hace sufrir tanto”

Arthur asintió y accionó de nuevo las palancas.

-“Dirígelo al norte Hans… solo quiero ir al norte”

-“Odias los pueblos del norte”

-“Sí… no pienso estar en ningún lugar que me parezca cómodo  hasta que el sendero de la princesa vuelva a cruzarse con el mío”

Simone solo encontró campo, ni un solo lugar mediamente honrado para pasar la noche, así que no tuvo opción y se acurrucó en el hueco de un árbol con las esperanza inútil de poder dormir un poco.

Sentada en el montón de hojas secas y el cuerpo titiritando de frío, se dio cuenta de que había tomado una mala decisión, una decisión tomada por miedo.

-“Oh Arthur, todo lo que me enseñaste al parecer no sirvió de nada…”

Pasó varias horas pensando y discutiendo consigo, recordó los buenos momentos que pasó en la biblioteca y en que ella también le había enseñado cosas al filósofo; en ese gran edificio, no había ningún libro de cocina… eso fue lo que ella pudo ofrecerle.

Aquel fue el último pensamiento que la princesa tuvo antes de quedarse dormida, pero al despertar notó una extraña determinación, ella quería amar a Arthur, así que buscaría por sus medios a la persona que le robó el corazón.




Licencia Creative Commons
Un filósofo, una princesa, un perro y una biblioteca. por Fabiola Velez se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 Unported.


No importa que tan mal vayan las cosas ¡pelea por tu destino!

¿Qué hará Simone para poder dar con esa persona? ¿Por qué Arthur odia el norte? ¿Hans tendrá intenciones puras? ¿de que simpleza hablan, en verdad la solución a este embrollo es tan sencilla?

Que genial, yo se todas las respuestas.


EDIT

Mientras escribía este pedazo (hace como 2 semanas) esto era lo que estaba escuchando (si, es de vevo) con una latita de coca-cola al lado, es una canción que me pone de buen humor, no es música de conocedores ni intelectualoides, creo que en eso radica su encanto (la letra es bella bella) no se, me imagino a Simone improvisando mientras camina y tararea frases de la canción.

Seré tu luz, seré un disfraz,
una farola que se encienda al pasar,
cualquier mariposa, la estrella polar
que viene sola y que solita se va
seré el sabor de un beso en el mar,
un viejo proverbio sobre cómo olvidar,
Seré inmortal, porqué yo soy tu destino.

Él escribe una carta que jamas será leída, ella canta una cancion que no llegará a otros oídos, pese a ello, ninguno se ha dado por vencido.



Eso sí, el final del video siempre me recuerda al keyboard cat

1 pensamientos.:

Lili dijo...

Que bonita ;o; ya no te tardes tantísimo en la continuación siempre me dejas muriendo de curiosidad.
Por cierto, me apunto de una vez por si decides vender libritos de esta historia.

What Would Lisbeth Do?